Parece que a Madonna le ha caído muy mal que se haya especulado sobre su diferencia de edad con Jesús Luz como razón de su ruptura. Aunque afirma mantenerse en una estupenda forma física, lo cierto es que la cantante se ha empezado a preocupar, de una forma un poco obsesiva, por su aspecto físico.
"Madonna no puede aceptar que tiene que hacerse mayor como cualquier persona y cree que puede evitarlo pagando" explicó una fuente a 'Showbiz Magazine', recogida por Europa Press. "Tiene un ritual de belleza diario que le lleva horas y horas y está obsesionada con las cremas faciales y los tratamientos cosméticos", anotó.
Tan obsesionada parece estar la artista con su imagen que ha admitido 'volverse loca con cada nueva arruga o línea de expresión'. De hecho ya está planeando pasar repetidas veces por quirófano para conservar su aspecto y evitar parecer una "mujer vieja y desaliñada".
Probablemente haya sido el susto de lo noticia publicada sobre su ruptura con el modelo brasileño lo que haya animado a Madonna a cuidar no sólo su atlética figura, sino también su cara.
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